Para los que se quejaban de que no aparecía el buen fútbol en la copa del mundo, se inició el grupo H.
En el partido más esperado del grupo, España vapuleó a Ucrania por 4 a 0, con la presencia estelar del argentino Mariano Pernía (¿por qué será que se remarca que un deportista es argentino cuando a su equipo -o a él mismo cuando el deporte es unipersonal- le va bien, y se lo minimiza cuando le va mal?. No escuché, ni leí, a nadie diciendo perdió Paraguay con el argentino Acuña en la cancha).
Como decíamos, el equipo de Aragonés demolió a los ex-soviéticos con goles de Xabi Alonso, Villa (2) y el Niño Torres. Sin duda la suerte (¿del campeón?) estuvo de su lado en los 2 primeros goles, y el árbitro también en el penal que derivó en el 3º, pero también es cierto que los ibéricos demostraron una agradable vocación ofensiva.
Del otro lado, los ucranianos demostraron que, al menos por lo que se vio hoy, lejos están de ser la sorpresa del mundial. Una combinación desastrosa de falta de coordinación defensiva, exceso de pelotazos sin destino, un tsunami de posiciones adelantadas, y un alarmante frío en el pecho. Ni Schevchenko se salvó del desastre, solo algo del arquero y del rubio parecido a Machin.
Igualmente, deberían fijarse en la experiencia de Bulgaria en 1994, que después de debutar perdiendo 3-0 con Nigeria, se repusieron y terminaron 4tos en esa copa. Pero, los búlgaros tenían más temple y más onda(?).
Auspicioso lo de España, pero el Mundial se juega en 7 partidos, y no todos los rivales serán tan fláccidos como los ucranianos.
En el otro partido Túnez y Arabia Saudita igualaron 2-2 en lo que debe haber sido un entretenido encuentro, pero como no lo ví, ni lo escuché, no puedo hablar de eso. Igual, el grupo H ya es junto al A el que más goles tiene, y eso es siempre bienvenido.
NdR.: Sí, la foto es del Olé