Decepción

| martes, abril 25, 2006



Antes que nada, quiero decirles a nuestros queridos lectores que, a diferencia de otras páginas, el post a continuación no está hecho para "pegarle" a Riquelme, sino para hacer una crítica constructiva. Sin más, prosigo.

Jugaron Villarreal y Arsenal por la vuelta de las semifinales de Champions. En breves palabras, Villarreal mostró muy poquito. El Arsenal, por su parte, me genera una sensación extraña: tiene la pelota, juega bárbaro, llega a la puerta del área y...empieza a jugar fulbito. Eso no lo entiendo. Henry hoy parecía que le quería dar suspenso al partido no definiendo o encarando. En fin, con eso le basta.

El hecho más trascendental sucedió a los 87 minutos, cuando Clichy, muy inocentemente, saltó sobre Jose Mari (ese tipo juega en un semifinalista de Champions...mamita) y le cometió penal. Sin merecerlo, el Submarino Amarillo podía seguir vivo. Quién tenía los cojones para agarrar esa pelota? Adivinaron: Juan Román Riquelme. Y quiero destacar ésto, porque en la mayoría de lugares donde lean resúmenes de este partido, seguramente, en un país exitista como éste, van a escuchar todo tipo de gansadas acerca de "Riquelme, pecho frío" y demases. Ésto no es así: si fuese pecho frío, se escondía y dejaba que lo patee el Vasco (?). Riquelme lo erró, por si no se habían dado cuenta (lo pateó muy mal, muy anunciado y casi al medio).

Pero lo más importante es preguntarnos: que pasaría si esto se diese en una instancia definitoria del Mundial? Yo creo que como somos los argentinos, mandamos a colgar a Román. Ni más ni menos. Y me parece demasiado..."cuadrado" ese pensamiento. Lo que me preocupa es que le pase representando al país, porque al fin y al cabo, el Villarreal es su laburo, la Selección no debería serlo.
Ojalá sean solo fantasmas que aparecen cerquita del Mundial, y se dispersen con excelentes actuaciones de Román, y el técnico pueda darle toda la confianza necesaria.

PD: Me exaspera esa cara de nada