En este campeonato en donde todos coinciden que se juega mal, que los equipos carecen de regularidad y que de “buen” fútbol hay poco; lo rescatable es la paridad y los apretado que están todos los equipos en la punta del clausura.
A solo seis fechas del final del campeonato hay tres punteros y ocho equipos en cinco puntos. Hoy por hoy en que cualquiera le puede ganar a cualquiera (menos Racing e Instituto ¿Efecto Quiróz?) tenemos el campeonato soñado por todos, no por el juego bonito pero si por lo apasionante de la definición, que consagrará al que logre algo de regularidad en esta recta final.
De los punteros el mejor perfilado es Boca, porque no tiene la copa entre semana y los dioses parecen estar de su lado, no hay otra explicación para que haya sumado en los partidos contra River y Banfield. Los millonarios y Ñuls tienen Copa y además planteles cortos como para hacer rotación que de buenos frutos, los leprosos desde el comienzo están conscientes de que el plantel les puede quedar chico; en tanto que a los del Kaiser un elefante gigante los meo.
Lanus y el Lobo jujeño están en la lucha, pero nadie da dos pesos por ellos; además su lucha está en la tabla de abajo. Pero si hay algo que rompe todos los pronósticos y sobre todos los de Don Julio es que algunos de estos equipos gane el clausura, y recordemos que en 1978, año de mundial y otras cosas, el campeón del metropolitano fue un equipo “chico”. En la misma situación está Olimpo que necesita sacar puntos para zafar de la promoción y que poco le importa la tabla de “arriba”.
Y por ultimo están Colon y Velez, el Fortín también tiene que jugar por la copa y parece haber aflojado un poco en las últimas fechas pero tiene chances reales de pelear hasta el final. Y los de Santa Fe seguirán vendiendo humo siendo los eternos candidatos a revelación en cada inicio de campeonato para luego defraudar.
Así las cosas y viendo las super-ligas de Europa, donde desde hace varias fechas los campeonatos están definidos me quedo con la mediocridad y las patadas de Kupro.