Por diferentes razones de la vida esto no salió el sábado cuando fue noticia, si es que a esta altura de la vida es noticia que Belgrano le gane a Talleres. Desde el 22 de enero de 2000, cuando la “T” gano un partido por la copa revancha, el clásico se inclinó decididamente para los de Alberdi. en los siguientes 15 partidos, Talleres sólo pudo ganar uno (3-1 por el Clausura 2002 de Primera División), empató siete y perdió otros siete. Por si fuera poco, en esa misma racha los albiazules no pudieron marcar en 10 de esos juegos. Con sólo siete goles marcados en 15 cotejos, su promedio no llega a medio gol por encuentro. Todo muy pobre.
Pobre como también fue la actuación de los dirigidos por Saporiti que volvieron a tener ese miedo, casi imposible de explicar, al enfrentar a los piratas. En pocas palabras: Talleres no lo definió, después de ponerse 1-0 en ventaja, no aprovechó su momento para liquidar el partido. Fue un error demasiado grave. Fue otro el Belgrano que salió a jugar el segundo tiempo. Al ingreso de Andrés Aimar se sumó mayor determinación en todos sus hombres en el juego y la virtud de lograr rápido los goles.
El triunfo fue bien a lo Belgrano, para que no queden dudas que metiendo y metiendo siempre los pechos fríos pierden los partidos.
NdeR:
El presente post puede estar cargado con una pequeña dosis de parcialidad celeste
Pobre como también fue la actuación de los dirigidos por Saporiti que volvieron a tener ese miedo, casi imposible de explicar, al enfrentar a los piratas. En pocas palabras: Talleres no lo definió, después de ponerse 1-0 en ventaja, no aprovechó su momento para liquidar el partido. Fue un error demasiado grave. Fue otro el Belgrano que salió a jugar el segundo tiempo. Al ingreso de Andrés Aimar se sumó mayor determinación en todos sus hombres en el juego y la virtud de lograr rápido los goles.
El triunfo fue bien a lo Belgrano, para que no queden dudas que metiendo y metiendo siempre los pechos fríos pierden los partidos.
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