Cinco en el fondo?

Señoras y señores, jugó River. Como este hecho merece un examen amplio de su actuación, lo voy a hacer. Y al que no le guste, que se tome 20 latitas de guaraná con el Diego.

El partido empezó friccionadísimo, con un Corinthians que fué a buscar, con un Carlinhos enchufadísimo. Los defensores de River, en los primeros minutos, parecían desacomodados, perdidos. Lo que aprovechó sabiamente Tevez cada vez que encaraba. Sin embargo, en una actitud poco loable de el equipo argentino, comenzaron a irle duro, rozando lo asesino, a Carlitos específicamente (nah, que poco loable, yo le hubiera partido el peroné si soy de River, pero realmente le iban mal). Ni qué hablar cuando el jugador de Corinthians metió el primer gol para su equipo. Los defensores riverplatenses estaban desencajados (no hay otra palabra). Domínguez quería hachar todo lo que tenía cerca (además de sus clásicos quejiditos al árbitro, juez de línea o quien fuese), Talamonti salía lejos a talar (valga la reburrondancia) a Carlitos, y lo peor de todo fue Ferrari (en cuanto a agresividad, entiéndase). Una verguenza lo de ese chico. Cómo se puede ir tan mal?
Se notó claramente que River no encontraba su lugar en la cancha, y quería sacar el partido adelante a partir de la clásica "guapeza" que se dá en estos encuentros de la Copa Libertadores. Sin embargo, River rápidamente llegó al empate, con un centro por izquierda, que rebota en un jugador del conjunto brasilero, y Farías, con una muy buena chilena a baja altura, la pone contra un poste (aunque el arquero dejó mucho que desear). A partir de acá, todo siguió igual, pero con un River yendo más al frente. A pesar de ésto, en una jugada desafortunada, Ferarri le fué muy muy mal a Mascherano (justo a él, con razón no jugaron juntos) razón por la cual le valió su ...amonestación. Primer gran error gran del árbitro, porque a continuación, Ferrari se mandó un jugadón por izquierda, y puso en ventaja a River por primera vez en el partido, con un auténtico golazo. El partido comenzó a dejar de ser tan claro como antes, con un River más ofensivo, y un Corinthians que, realmente, era Tevez y el que se parece a Lenny Kravitz (morfón!). Así se fué la primera etapa.

En la segunda etapa, miles de cosas pasaron, pero si me voy a poner a comentar todas, no terminamos ni el día del Pato Fillol (que debería existir). River salió a ver que hacía el Timao pero siempre con la vista puesta en el arco de enfrente, con un Gallardo muy enchufado, con un Ábán muy movedizo como en el primer tiempo y con un Farías que volvió a uno de sus buenos momentos. Corinthians no era realmente claro, pero iba e iba con sus laterales. Rubens Junior por izquierda, y Cohelo por derecha intentaban incomodar a River. Generalmente, las subidas más peligrosas se dieron por el lado izquierdo, con un Rubens totalmente egoísta. Tévez seguía siendo la gran figura gran del partido, moviéndose de un lado a otro, llevándose las marcas, entregándole la pelota en situaciones claras de gol a sus compañeros. Sin embargo, jugaba solo. Una de las más claras fue el pelotazo en el palo de Cohelo, tras una muy buena acción de Tevez actuando como pivote. De repente, un córner para el Timao. Suben todos a cabecear. La pelota llega al corazón del área, alguien la conecta y sale disparada hacia el segundo palo, donde Tévez la empuja al gol. Acá está el otro gran error de los arbitrajes en este partido: cómo va a levantar el juez de línea la bandera, si no tiene idea quién la cabeceó? Porque eran muchas cabezas (nadie puede dudar eso) y ni por tele se había visto claro quién había impactado la bola. Conclusión: el mamerto que la había cabeceado era el "Fede". Si fuimos tan duros todos (incluidos hinchas de River) con lo de Pezzotta el otro día, hoy también debemos serlo: la expulsión de Ferrari y este gol hubiesen cambiado todo el partido. No sé si River se hubiese bancado dos golpes anímicos como ésos (tome cualquiera de los dos, señor espectador, son los dos muy malos). En fin, a River en la Copa siempre se le recuerdan favores arbitrales (Luchetti debe estar llorando todavía por aquel penal jugando para el Santos Laguna) y ésta no fué la excepción. Sin embargo, el partido se siguió jugando, con un Corinthians yendo a fuerza de voluntad, y un River que tenía ocasiones de contra y las quería aprovechar. Corinthians se quedó tontamente con uno menos, por un intercado en un lateral. Y River se fué con todo. En una jugada con muchas ocasiones de gol en una, Santana consiguió meterla (arquero, arquero, esas pelotas se tiran al córner, arquero!) y deliiiiiirio de la gente de Núñez. Espectacular la remontada de River, a puro amor propio, a pura garra, se estaba tornando Amarilla de emoción la gente. Corinthians, con uno menos, y dependiendo de Tevez, no se preveía que iba a poder hacer demasiado. Pero (y en este tipo de Copa siempre hay un pero) se produjo el pequeño milagro para el Timao: falta tonta contra la raya derecha en el campo de River. Se viene el centro, todos los grone del conjunto brasilero van y Fabao vacunó. La gente de River se quedó estupefacta, y al término del partido, se pudo ver los reproches de todo el equipo (Ferrari, Gerlo, etc) a Santana (se vé que la marca era de él). También se escuchó un "dejá, dejá, después lo vemos de Ferrari.

Como resumen de este partido, quiero destacar ciertas cosas:

- El excelente partido de Carlitos. Cómo se motiva para jugar contra River. Se subió el equipo al hombro, conta el rival de toda la vida, metió un golazo (y otro no cobrado) y lo gritó con alma y vida (y a la madre de alguien también). Muy bien 10 para el nacido en Fuerte Apache.
- La pifia de Dominguez en el primer tiempo. Pobre Lux, tuvo que hacer uso de todos los reflejos posibles para sacar esa pelota al córner.
- La "guapeza" que intentó imponer River, inútilmente, en el primer tiempo para llevarse el patido por delante. Luego se dió cuenta que tiene jugadores que podían hacer algo más que pegar y lo lograron.
- La remontada de River: demostró mucho coraje, realmente, y unas ganas de ganar terribles (le está haciendo competencia a Estudiantes parece). A partir de eso, logró dar vuelta un partido que pocos se imaginaban. Muy buenas actuaciones de Gallardo, de Abán (gran partido, aunque no me guste) y sobre todo del "Tecla" Farías.
- La paupérrima actuación de Carlos Amarilla, fallando en los momentos claves. Los árbitros de Sudamérica son de lo peor, realmente, y sobre todo los que van al Mundial.

(Apelo a toda la sinceridad del pueblo riverplatense, para que opinen con criterio y sin la camiseta, desde ya, gracias)