Se disputó la otra primera vuelta de la semi de Champion, entre Villarreal, de España (el modesto, austero, irritante, combativo, luchador) y Arsenal, de Inglaterra (el lujoso, ostentoso, ochentoso (?) novedoso). El partido salió 1-0 a favor de los ingleses. Ahora vamos a lo que nos interesa...
El partido empezó sin un dominio claro de ninguno de los dos. La pelota iba y venía, Riquelme la pedía, trataba de tenerla e hilvanar una jugada de peligro. Inútil, nadie lo acompañaba (son todos tan burros como parecen en el Villarreal? por qué no lo llamaron a Bianchi para dirigir?). Hasta que apareció Henry, y sobre todo, apareció Ljunberg (sí, sueco tenía que ser). Fredrik se lanzó por la banda derecha una y otra vez (cada vez más deseo ser español) desbordando a unos defensores españoles que trataban de controlar como podían a este aluvión de talento. Por la otra banda, Henry hacía prácticamente lo que quería con Javi Venta: como se dice comúnmente "lo sacaba a pasear". El gol estaba al caer. Y cayó. Luego de un tiro libre o un córner (comprendanme, me levanté temprano) le quedó la bola a Henry sobre el costado izquierdo. Tití la aguantó hasta que Hleb (que buen apellido) se desmarcó adentro del área grande. Hleb recibió, levantó la cabeza y sacó un buscapié mortífero que recaló en uno de los pies de Touré, para decretar el 1-0 merecidísimo a favor del conjunto londinense. Todo indicaba que el Villarreal iba a salir a atacar y buscar el empate. Bueno, indicaba mal lamentablemente. Pellegrini decidió que perder por un gol en Highbury era negocio e indicó a sus jugadores tener la posesión del esférico y tratar de no sufrir más contratiempos. Sin embargo, el Villarreal tuvo su oportunidad, cuando José Mari fue derribado muy claramente (el árbitro un desastre todo el partido) desde atrás, (jugada de amarilla) pero para el referee esto no existió. Así se fue el primer tiempo, con un Arsenal arriba en el marcador e intentando, y un Villarreal "tranquilo".
Segundo tiempo, se mantiene la base. El Arsenal buscaba aumentar la diferencia, y Riquelme la pedía pero siempre se la daban cuando tenía 3 tipos a los costados. José Mari demostró que es horrible, y el Vasco intentaba sacar al equipo. Marcos Senna era de lo mejorcito en el Villarreal, pero le faltaba decisión para dar la estocada final. Así se desarrolló la mayor parte del segundo tiempo, y así terminó el partido.
Comentario del autor: si el Villarreal pretende llegar más lejos, algo tiene que hacer. Si Pellegrini piensa apelar otra vez a algún cabezazo salvador del Vasco, y nada más, está muy equivocado. Tendría que replantearse varias cosas. El Arsenal hizo un papel bueno tirando a muy bueno, jugando por abajo, tratando de buscar a Henry y triangulando éste con Fabregás y Ljunberg, pero le faltó aumentar un poco más el resultado.
Para redimirme un poco