¿Qué pasa con...el River del Cholo?

| viernes, agosto 29, 2008


Con la obtención del pasado Torneo Clausura 2008, muchos dedujeron que aquel juego no del todo convincente que había desplegado el River del "Cholo" Simeone iba a mutar en una nueva versión, mucho más aceitada, y sin esa presión de los 4 años sin haber conseguido títulos de la institución riverplantese. La lógica era simple: si jugando no del todo bien había salido campeón, sólo quedaba mejorar.

Apurándonos a hacer conjeturas, con sólo 3 fechas jugadas en este nuevo Torneo Apertura 2008, la lógica no se dió. El equipo de Diego Simeone aún no ha logrado plasmar ni 1/4 de todas esas ideas futbolísticas novedosas que parece tener su técnico, y parte de esta falta de buen fútbol o, por lo menos, fútbol vistoso, tiene que ver justamente con cambiar constantemente. Ningún equipo puede lograr una identidad propia si un día juega con un 4-3-1-2, al siguiente con un 3-4-3, y al final termina con un 4-2-3-1. Es imposible crear un estilo de juego si se va mutando constantemente. Sin embargo, parecería ser que Simeone está intentando encontrar ese esquema ideal que le permita jugar bien al fútbol, pero también mantener el arco en cero. Por ahora, el sistema que mejor le ha funcionado es el 4-2-3-1. La cuestión pasa por saber si lo mantendrá de una vez por todas o lo seguirá cambiando partido a partido.
Por otro lado, que River no juegue decididamente bien, está claro que no responde en gran parte al mercado de pases que ha desarrollado en el último receso. Repasemos. Se le fueron: Abreu, Sánchez y Ortega (además de J.P. Carrizo). Llegaron: F. Quiroga, volvió Barrado, Galmarini, R. Flores y Salcedo. A priori, uno podría decir que, si bien no salió beneficiado, tampoco es que Sánchez la haya descocido en River (pese al inflador constante que muchos medios ejercían sobre sus actuaciones, y los lujitos que pudiese tirar) o que Abreu haya salido goleador del torneo. El caos de Ortega sí es más particular porque pese a haber jugado poco, generalmente lo hacía en gran nivel (igual, a nivel personal, a River no le podía venir nada mejor que deshacerse de un tipo tan conflictivo). En cuanto a los que llegaron, Robert Flores y Salcedo son los que más interés despiertan. Uno, nacido en Uruguay, por haber aprendido de Juan Ramón Carrasco el fútbol ofensivo a pleno, y el otro por haber metido cualquier cantidad de goles en Newells, y de todos los colores también. Por ahora, no han hecho demasiado.

Habrá que ver que sucede con River. El plantel no es malo ni por asomo, pero tampoco es una pinturita. Sí hay que decir que tienen muchos más jugadores que el 90% del resto de los equipos del fútbol argentino, pero eso muchas veces no quiere decir nada. Hoy vemos a Colón y a Tigre en la punta: ¿tienen un plantel acorde a esta posición? No, pero están. Habrá que ver ahora cuanto duran y cuanto mantienen la presión. River tiene que volver a encontrar ese buen funcionamiento que se iba armando al final del pasado campeonato, y que terminó en su pico más alto prácticamente. Aunque, si gana, quién le va a ir a decir algo al "Cholo"...