Nigeria se transformó en el nuevo campeón del mundo de la categoría sub 17 al vencer a España por penales, tras igualar en el tiempo reglamentario en un triste 0-0. En el momento de mayor suspenso, los nigerianos sobrellevaron mejor la presión y acertaron con claridad al arco español. Mathew Edile, Daniel Joshua y Gani Osen anotaron para los africanos, mientras que Asier Illarra, Fran Mérida e Iago fallaron en el equipo ibérico, y de esta manera se desató la locura nigeriana. Los africanos ya habían conseguido los mundiales de l985 en China y Japón en 2003. En Canadá 1987 y Trinidad y Tobago 2001, habían quedado subcampeones. Aunque siguen demostrando graves falencias cuando enfrentan en categorías mayores a seleccionados fuertes. Las pruebas sobran. Sin embargo, y a pesar de las dudas manifiestas sobre la edad de algunos de sus futbolistas, es loable destacar que con esta victoria alcanzaron el récord de tres títulos que tiene Brasil y siguen confirmando su predominio en materia juveniles, en las cuales logran sacar demasiada ventaja desde lo físico contra los rivales, que no pueden soportar la presión asfixiante de un equipo que jamás baja el ritmo en los 90 minutos. Argentina lo sufrió más que nadie.