El Dolor de Ya No Ser

| martes, octubre 31, 2006


El domingo jugaron -y aburrieron- Independiente y River.
Sabido es que el presente de River está bastante alejado de lo que su historia marca, pero, mal que mal, sigue peleando los torneos, aunque acostumbrándose -peligrosamente- a correr siempre desde atrás.
Igualmente, este post no es sobre el Millo, es sobre el Rojo.
El tercer equipo argentino por logros, por historia, y -casi seguro- por gente, pero a su vez, un equipo que hoy por hoy ni siquiera tiene una cancha en condiciones para jugar, recurriendo nada menos que a la de su clásico rival.
Viéndolo el otro día, con varios jugadores impresentables, y defendiendo el 0-0 con 9 tipos adentro del área como si enfrente estuviera Holanda del ´74, fue realmente triste.
Está bien, este no es el peor equipo que ha tenido en los últimos tiempo. El plantel con Zelaye, Satanás Paez, Pekarnik, León Bustos y otros tantos muertos, era sin duda mucho -muchísimo- peor que el actual.
Pero que lejos ha quedado la época del Bocha, de Burruchaga, de Villaverde y Trossero, de Marangoni, o aunque sea la de Garnero, Gustavo López, Cagna, Usuriaga y Rambert.
Hoy sólo quedan los millones -cada vez menos- de la venta del Kun Agüero; Ustari, Montenegro y poco más.
Ya no es "El Orgullo Nacional", ya no tiene "Paladar negro", es más, hoy por hoy, por actualidad deportiva, ni siquiera es el rival más complicado del municipio, hasta Arsenal suele terminar los campeonatos encima del Diablo.