El escándalo del Lobo no cesa

| jueves, noviembre 01, 2007


Conocidos son los hechos del año pasado en Estancia Chica, donde previo al partido que iba a disputar Gimnasia de la Plata ante el primer equipo de Boca Juniors, una cantidad considerable de barrabravas se acercaron a la concentración del equipo platense y les exigieron, en un tono "amable" (según los mismos jugadores y cuerpo técnico que vivieron esta experiencia) que "no dejaran todo" en el partido a disputarse, para evitar que su eterno rival, Estudiantes de la Plata, saliera campeón. El resultado de esa situación es conocido por todos también: un contundente 4-1 del equipo de la Ribera, con goles que casi no fueron gritados en señal de ¿respeto? a lo que habían vivido los jugadores de Gimnasia, que nunca se animaron a declarar y desenmascarar a los violentos que dominaban y dominan ese club.

La historia es nueva pero, a la vez, vuelve a repetirse. En el día de ayer, el club tripero desarrolló una Asamblea General Ordinaria, a la que asistieron los socios, la Directiva actual (Muñoz está de licencia, así que su lugar lo ocupó el Vicepresidente 1º) y también, claro está, una fuerza de choque especialmente organizada, con handys y demás chucherías, por el sector oficialista del club, para evitar "malos entendidos" (?). A la prensa se le prohibió expresamente asistir a la misma. La cuestión es que la Asamblea venía desarrollándose de forma bastante tormentosa, con muchas discusiones, y alguna que otra silbatina antes supuestas irregularidades que no se mencionaban en el balance, cuando todo se empezó a descontrolar. En el tumulto, entre personas del sector político opositor del club, y los energúmenos estos que contrató el club, una persona no pudo soportar lo que estaba viendo, y de los nervios, sufrió un paro cardíaco. La persona era el asociado y ex dirigente Oscar Montecino, quien se sintió mal y tuvo que ser asistido por algunos de los presentes, para luego ser trasladado en ambulancia al hospital más cercano y fallecer a los pocos minutos.

Hasta acá, nada que nos pueda sorprender: una Comisión Directiva, que quiere sacarse de encima el problema de presentar un balance y de escuchar opiniones que no le gustan demasiado, contrata un grupo de tipos que se dedican a generar violencia, para "apaciguar" y "hacer callar" a las voces que no estuviesen de acuerdo con aquellas personas que los contrataron. Por suerte, parece que alguien sí va a tomar algún tipo de medida. Ese alguien es un fiscal que estuvo presente en la Asamblea, Rubén Sarlo, que vió todo, y que está dispuesto a, de no actuar la justicia de oficia, iniciar una causa para esclarecer el tema y sancionar a quien haga falta sancionar. "De repente se empezó a movilizar un grupo de lo que yo diría 'un ejercito marginal' que se ha instalado en Gimnasia, no sólo en las tribunas y en Estancia Chica en aquellos episodios conocidos, sino que anoche estuvo instalado estratégicamente entre todos nosotros y con una logística con handys que les permitía estar intercomunicados. Aquí había una planificación en cuanto a que si la cosa se ponía mal, había que hacer algo". Textuales palabras del socio y fiscal platense.

La verdad es que ya no se sabe que más agregar. Ahora, no contentos con no dejar expresar a la gente, colateralmente causan muertes estos tipos que no merecen ni llamarse personas. Me parece que está claro que ya ganaron los violentos hace rato, y la AFA sigue mirando hacia otro lado. "Grazie Grondona, grazie...".