Hace algunos días habría trascendido la noticia que incluía a un jugador, titular en la Selección Argentina el último partido ante Alemania, que habría jugado lesionado (supuestamente) 100 de los 120 minutos disputados. Ante este rumor, se empezaron a tejer ciertas sospechas sobre qué jugador en particular era el mencionado. Algunos hablaban de un posible Román, fatigado excesivamente y con algún tipo de sobrecarga muscular, otros de un Heinze y algún vestigio de la vieja lesión, pero la realidad era que todos los boletos se los llevaba un recién recuperado (?) de un desgarro: Lucho González.
Al parecer, Lucho no habría estado del todo recuperado para afrontar el partido del pasado viernes ante los teutones anfitriones, pero Pekerman juzgó que era una pieza clave y fundamental del equipo, por lo que fue parte de los 11 titulares que salieron a la cancha. Poco tiempo después, aproximadamente a los 20 minutos de comenzado el encuentro, Lucho hizo una seña al banco, indicando que "le tiraba" el músculo. Obviamente, en el banco de Argentina hubo muchas caras de preocupación, pero el jugador pudo seguir hasta finalizar este periodo. En el entretiempo, las voces dicen que habría sido infiltrado, pero que el desgarro se habría agudizado. Durante todo el segundo tiempo, si se observan detenidamente las imágenes del partido (actividad que el servidor que les cuenta ha realizado) se nota a un Lucho con poca movilidad, casi nula, que, con gran sacrificio, intenta serle útil al equipo. En los suplementarios, sin embargo, se vió a un Lucho más activo, con 2 disparos al arco germano, con leves mejorías.
Más allá de si Lucho, aún con la lesión, pudo o no desempeñar un buen papel: está bien que José haya puesto a un tipo que no estaba al 100% de su capacidad física? Personalmente, creo que no. Si bien es verdad que hay jugadores que, por la importancia dentro de un equipo, no pueden salir ni aunque estén en una pierna (léase el más grande) sinceramente a Lucho, dentro de ese plantel que se armó, lo considero un tipo totalmente prescindible. Su puesto podría haber sido ocupado por Cambiasso. Pero por sobre todas las cosas, no creo que sea coherente poner a alguien que se recuperó en 10 días de un desgarro, que casi siempre demanda mínimo 15 o 20 días. Ahí hay un error de selección del entrenador. Y un error así no puede pasar por alto en el seleccionador del conjunto albiceleste.