El debut del Diego

| lunes, marzo 30, 2009


La aparición en el Monumental al frente de la Selección Nacional de Diego Armando Maradona sin dudas fue la nota en la pasada jornada de Eliminatorias, objetivo Sudáfrica 2010. La expectativa que se había generado era muchísima, y teniendo en cuenta al personaje y a la intérprete (la Selección) no se podía decir que era exagerada. Era la primera vez que el Diego, el Diez, ese muchacho de Villa Fiorito que algún día dijo tener como sueño "ganar un Mundial" y luego lo consiguió, iba a estar con el buzo de DT dirigiendo a la Selección en casa. Afortunadamente para todos los argentinos que coparon el Monumental y también para aquellos que lo vieron por TV, el saldo fue favorable para nuestra Selección por 4-0, con goles de Messi, Tévez, Maxi Rodríguez y Aguero. Repartido y abundante. Pero, analizando fríamente: ¿como jugó la Selección?.

La primera sensación que tuve al finalizar el partido, reunido con varios amigos, partió de la siguiente base: Argentina fue efectiva. ¿Quiere decir esto que Argentina jugó bien? Depende desde donde se lo mire. Si hacemos un balance general, sin dudas que se jugó relativamente bien, se hizo circular la pelota y se generaron chances de gol...mayormente en el segundo tiempo. Es cierto, jugar contra 10 tipos colgados del travesaño (el único aislado era Maldonado, que hacía lo que podía) y tener encima la presión de ser "el equipo del 10" nunca es fácil. Más allá de esto, creo que se intentó abrir la cancha con Maxi y principalmente con Jonás, Messi intentó ser la manija sin poder lograrlo, y Mascherano fue el más destacado en esa primera parte. Para el segundo tiempo, la cosa cambió, y aquel lindo gol que diagramaron entre Zanetti (cuantas puteadas habrá recibido en la jugada previa), Tévez y Messi en la primera parte pareció brindar tranquilidad a largo plazo. Esto se potenció más aún cuando, en una de sus escapadas frenéticas, Messi llegó al fondo y, cual wing derecho, le puso la pelota en el pie a Tévez para que pusiera el 2-0. Luego llegarían los goles con un poco de suerte de Maxi Rodríguez (que siempre de una u otra forma llega al gol) y Sergio Aguero (con ayudita del arquero). En cuanto a la faz defensiva, sin dudas no fue uno de los mejores partidos de Argentina. Esta línea de 3 improvisando a Zanetti de stopper, Angeleri de líbero y Heinze por izquierda no brindó la seguridad necesaria y volvió a evidenciar algunas cosas claras desde el arranque: Angeleri es altamente tosco para jugar libre y anticipar y Heinze con línea de 3 es una invitación a mandarse cagadas. Dicho esto, vale reconocer el saldo favorable en la apuesta con Zanetti en una posición que no le sentó tan extraña y a la cual se supo adaptar. A simple vista, es claro que Maradona privilegió la creación en ataque a la seguridad defensiva, y que este mismo esquema difícilmente vuelva a repetirse (menos en Bolivia, con altura). Se jugó a jugar y a dejar jugar, si se quiere expresar de esta forma, y salió bien. Pero es claro que Heinze cubriendo tanto sector del campo de juego es peligrosísimo. Por suerte, en la única que se equivocó Carrizo se jugó la vida y evitó el gol visitante. Seguramente en el próximo partido se vuelva a la línea de 4 con Zanetti, Demichelis, Heinze y Papa.

Ateniéndome a mi visión particular del fútbol (?) sin dudas en mi equipo titular no estaría, desde el arranque, el yerno de DAM. ¿Por qué digo esto? En este esquema, el delantero del Atlético de Madrid no tiene lugar. Es necesario tener una referencia en el área, y esto se evidenció en la primera parte, cuando Venezuela estaba armadito y sin problemas (el primer gol argentino fue de contra, recordemos). Léase Diego Milito, Lisandro López, Germán Denis o quien sea: Argentina debe tener un faro si va a jugar con dos puntas por afuera. Igualmente, sigo sin entender demasiado la función de Tévez en el esquema del 10. ¿Es wing? ¿Es delantero por adentro? ¿Es mediapunta? Queda poco claro. Ya desde un punto de vista extremadamente subjetivo y refiriéndome a gustos personales, creo que el miércoles en Bolivia sería una chance bárbara para probar a Lisandro López. El jugador del Porto hizo ya muchísimo mérito para lograr una oportunidad en la Selección Nacional, y es hora de probar con variantes. Puede jugar tanto de centrodelantero como por afuera, y tiene una capacidad goleadora que asusta en su equipo de Portugal. Pero si no es él, también puede ser Diego Milito (de excelente andar en el Calcio) o en su defecto Germán Denis (aunque en el último tiempo no viene teniendo un buen nivel). O si quiere incluso alguno más, pero Aguero no puede ser 9. Principalmente por condiciones físicas: un chiquitito nunca va a poder aguantar pelotazos o ganar en lo alto, por lógica. Y si va a jugar en el lugar de la cancha en el que juega actualmente, va a perder más de lo que va a ganar. Si se quiere, podría ser una opción para ir por afuera, pero no para intentar ganar desde adentro. Cambiando rotundamente de tema, ¿qué decir de la actuación de Lionel Messi? Sencillamente extraordinario. Una vez más, y por si a alguno le quedaba alguna duda, Lío necesita ser la manija del equipo, y esto no lo podía hacer con un tipo como JRR al lado. No hace falta hacer demasiada memoria para recordar como el jugador xeneixe elegía cualquier otro jugador antes de combinar con el jugador del Barcelona de España. Llámense diferencias personales o futbolísticas, la realidad es que Messi rinde mejor cuando es el eje y el centro de atención...y cuando Román no está. Dió una asistencia, abrió el partido con su gol y hasta tuvo tiempo de hacer una jugada con tinte maradoniano que no entró por poquito. Sin dudas un digno merecedor de la 10.

En fin, para no hacerlo demasiado extenso, el debut fue auspicioso y, sin volvernos locos, terminamos todos felices y contentos de haber superado claramente a un rival claramente inferior. Esto no es ni para saltar en una pata ni para desmerecer el triunfo, porque recordemos que jugadores similares, con un técnico mucho menos trabajador, empataron en el último minuto con Ecuador y no hicieron grandes actuaciones en los últimos encuentros. Todo debe ir en un contexto. Ojalá que el miércoles podamos cantar victoria nuevamente.