La mistica del León...

| jueves, marzo 06, 2008


¡A puro huevo senores!, El Estudiantes de Roberto Sensini se bancó mas de una hora con un jugador menos y con mucho corazón, con mucho amor propio y con un Verón estupendo, se lo dió vuelta al complicado Danubio en el Centenario. Sin dudas, que nuevamente y en un estadio que alberga muy buenos recuerdos, volvió a resurgir esa mística copera que tanto distingue al "Pincha", esta que lo llevó a protagonizar una nueva proeza, en una nueva noche de emociones que contó con 7.000 pinchas que coparon y se hicieron sentir como nunca en el mítico escenario uruguayo...
El encuentro fue vibrante y emotivo, cargado de dramatismo desde el inicio, con dos equipos que llegaban obligados a ganar para no quedar demasiados relegados en la zona 2 de la presente edicion de la Copa Libertadores. Ambos acudían al duelo con solo un punto de seis posibles, por lo cual los tres que estaban en juego eran de real importancia. El equipo argentino arrancó muy bien, sólido en defensa y picante arriba, ya que en pocos minutos había generado dos jugadas de peligro, mientras Danubio aguantaba, con buenas intervenciones de su arquero
Conde...
A los 9m llego el sorpresivo tanto de
Irala, quien marcó de cabeza para adelantar, inesperadamente a los locales. Aunque este tanto en contra no fue la peor noticia para el "Pincha", ya que sobre los 20m Alayes fue expulsado.
La segunda parte fue de película, con un Estudiantes que sacó a relucir todo su amor propio, luchando con un menos en una batalla copera que alcanzaba tintes dramáticos: en esta batalla fue conmovedor lo del
"chapu" Braña, quien se corrió absolutamente todo y más, tambien es para destacar el buen ingreso de Basanta en la zaga central, el aporte de Benitez, el de Lázzaro, quien tambien ingresó en la segunda parte y por supuesto, el de Juan Sebastian Verón, el alma y el estandarte ineludible de este equipo, quien además de jugar con el corazón desparramó talento por el mojado cesped del Centenario. El empate llegó tras un penal del cual se encargó la "Bruja" luego de una inocente falta de Irala a Desábato. De aquí en mas, el partido fue a todo o nada, golpe por golpe, de ida y vuelta, con situaciones en ambos arcos, hasta que a falta de tres minutos, Estudiantes golpeó las puertas de su mistica y lo ganó, tras una magnífica asistencia de Veron para Enzo Perez, quien luego de amagar y dejar pasar a un rival, definio casi cayendose ante Conde. El delirio se desató y 7.000 almas "pincharratas" gritaron y disfrutaron de una noche copera exepecional. Si Estudiantes, más León que nunca hizo valer su estirpe, esa que aun sigue viva...