Una de Hollywood

| viernes, diciembre 14, 2007


Como sacada de la historia principal en una película, la historia de Al Bangura es cuanto menos shockeante. Al, nacido en Sierra Leona, y actual jugador del Watford, de la Segunda División Inglesa de fútbol, llegó al Reino Unido en el 2003, a la edad de los 15 años. Amenazado por la cruda realidad que vivía en su país de origen, sufrió la desaparición de su hermana y su madre, y el asesinato de su padre, a los 4 años. Su progenitor era la mayor autoridad en una de las tribus de ese país, llamada "Soko", de gran incidencia en la guerra civil constante que azota a este país; sin embargo, Al quiso forjarse un futuro diferente, de la mano del fútbol. Como primer medida, el volante, padre hace pocos días y de 19 años en la actualidad, se exilió a Guinea, donde recibió todo tipo de proposiciones, incluso las de algunos hombres que, bajo el pretexto de llevarlo a Inglaterra, lo obligaron a prostituirse, a lo cual él se negó. Finalmente, llegó hasta el Reino Unido en el 2003. Allí, un buscador de talentos del Watford (club que en la temporada pasada disputó la Premier League) lo vió pegandole a la redonda contra la pared, y le bastó para saber que tenía un talento en potencia. Con el paso del tiempo, Al formó una familia y recientemente tuvo un hijo.

Sin embargo, por una cuestión de papeles, al llegar a la mayoría de edad, Al no se encuentra autorizado para permanecer en el país, por lo que debería ser deportado a su país natal. De hacerse esto, y por el pasado de su padre, la vida de Al corre un grave peligro, con una muerte casi segura. Todo Inglaterra se está movilizando para que se le brinde a este joven jugador la posibilidad de permancer en el país, donde supo forjarse un presente e idealizar un futuro...