Lo que dejó la fecha

| lunes, abril 23, 2007


Muchas cosas sucedieron en este fin de semana futbolístico en el torneo Clausura, pero más que nada, fue un fin de semana de confirmaciones. Porque de confirmaciones, a saber:

* Boca, con un gran triunfo luego de mucho tiempo en Rosario, ante Newells (vale aclarar que se juntaron las dos barras bravas en un típico gesto fraternal de amistad y de lo que algunos se empeñan en llamar folclore del fútbol) por 2-1. Si bien fue ligeramente ayudado por el árbitro, el equipo de Russo se muestra firme y sólido fecha a fecha, aún con la Copa Libertadores complicando un poco las cosas.

* Estudiantes, sin dudas, está destinado a ser el equipo con más garra del fútbol argentino. Con un jugador menos desde los 4 minutos del partido (estúpido codazo de Calderón, alguien experimentado, sobre un defensor de Gimnasia LP) el "Pincha" dió vuelta un resultado ante un "Lobo" que día a día demuestra que la recuperación no le va a ser fácil. Gimnasia de la Plata quedó muy golpeado a raíz de los sucesos del año pasado, y esa es una herida que va a costar cerrar. Por otro lado, vale destacar la gran tarea de Mariano Pavone, que si bien en su paso por la Selección tuvo una tarea paupérrima, en el clásico de la Plata fue fundamental anotando los dos goles con que su equipo derrotó a su archirrival, por 2-1. Al parecer, el Pincha quiere dar pelea, y sueña con el bicampeonato.

* San Lorenzo, a esta altura del campeonato, se puede decir que es una realidad. Sin jugar bien, sufriendo más de la cuenta, siendo superado por su rival, logró un triunfo vital en Mendoza, ante Godoy Cruz, por 2-1. Vale aclarar que a lo largo de todo el partido el "Tomba" fue más que el "Cuervo" y mereció, sino ganar, cuanto menos empatar el partido. Con grandes jugadores como Villar y Arzuaga (que tuvo un mal partido esta vez) promete dar pelea para mantenerse en la categoría, y, como dijo Ramón Díaz, "varios equipos van a perder puntos en Mendoza".

* River dió un paso hacia la recuperación. En la tarde de ayer, derrotó por 2-1 a un Banfield que ya puede ir preocupándose por los promedios de la temporada que viene. Si bien el "Millonario" terminó sufriendo más que disfrutando el partido, pudo haberlo liquidado en alguna de las 14 situaciones de gol que tuvo ante un tímido equipo del Sur que sólo llegó dos pares de veces. Abrió la cuenta el mejor jugador de River, Paulo Ferrari; luego Tuzzio, en una jugada increíble, anotó en contra de su propia valla, y ya en el segundo tiempo Belluschi, con un zapatazo, marcó el 2-1. Si bien parece lejana la punta, nunca hay que dar por muerto a un equipo como el de Núñez, que muchas veces suele pecar de melancolía, recordando a ídolos ya acabados.