El arrepentido

| miércoles, septiembre 13, 2006


Uno entiende que a veces un jugador está con mil pulsaciones (?) dentro de la cancha, y puede tener reacciones no acordes a lo que se espera de un profesional....pero era para tanto?

"Fue la peor expulsión que tuve. Me venía entrenando en doble turno para encontrar mi mejor forma. Te juro: estaba en un momento bárbaro para volver a jugar como antes. Ahora me siento sin fuerzas. Esto me hace bajar los brazos".

"El otro día miraba la tele con amigos y les dije que hubiera preferido haber estado en las torres gemelas que viviendo todo esto. De verdad".

Qué poquito piensan los jugadores antes de hablar ahora...